Más que haber sido una presentación literaria, fue un verdadero acto académico en extenso, una instancia totalmente merecida y a la altura del invitado principal.

En el marco del programa 2016 de la Escuela de Verano "El sonido y sus espacios habitables", organizada por la Dirección de Extensión UdeC, el auditorio de la Facultad de Humanidades y Arte fue el escenario ideal de la presentación de los libros "Obituario" y "La nueva provincia", del académico, doctor en lingüística y escritor Andrés Gallardo.

"A razón de mis ‘libritos’, lanzados hace casi treinta años, aprovecharon de hablar -la doctora en literaturas hispánicas María Nieves Alonso y el docente emérito Mauricio Ostria- sobre la actividad literaria, de lo que significa publicar en Concepción un libro de relatos, me dejaron realmente por las nubes (risas)", sostuvo Gallardo.

Puntualmente, "Obituario", su primera edición data de los años 85’ y 86’ (creciendo de 13 a 188 relatos), mientras que "La nueva provincia" vio la luz en 1987 bajo el sello Fondo de Cultura Económica en México. Un salto en años no menor, que al contrario de restarle vitalidad a ambos textos, se han impregnado de un segundo aire totalmente inesperado para el escritor.

"Me ha sorprendido la cantidad de gente joven que ha leído estos libros y que se han entretenido. Lo más interesante es que lo leen de una manera radicalmente diferente de cómo se leían cuando fueron publicados en la década de los ochenta", confesó el doctor en lingüística.

En detalle, "Obituario" es un texto de microrelatos que tal como lo anticipa su título, habla sobre la muerte -de las distintas muertes- en pocas palabras y de una manera sutil, es decir, son relatos breves en que se alude a la muerte, pero de una forma delicada e implícita.

"Lo que diferencia la escritura de Gallardo, y que dota de un matiz provocador a su escritura es el uso del humor, pero el de un humor ciertamente tierno, no sarcástico, de una ironía delicada que no es muy habitual en la literatura chilena. Es aquí donde el tema de la muerte adquiere una connotación especial, un rasgo distintivo de él. ‘Obituario’ es un texto parroquial donde se escriben las defunciones, pero no hay ninguna implicación de la muerte y ésta no tiene ninguna de las características ni denominaciones que abundan en la poesía y narrativa. En realidad ‘Obituario’ habla de la vida", explicó Nieves Alonso.

Independencia comunal
Mientras que "La nueva provincia" es una entretenida novela situada en la comuna de Coelemu, la cual busca su independencia luego del terremoto de 1939.

"Es una novela propiamente tal. Se trata sobre un alcalde de Coelemu con un grupo de colaboradores, quienes deciden que esta localidad es mucho más que una simple comuna, mereciendo ser una provincia, entusiasmándolos a tal punto que crean la república de Coelemu", señaló Gallardo.

A lo que añadió que "el libro comienza en 1939, a propósito de los estragos que causó el terremoto. Todo el mundo hablaba de lo ocurrido en Chillán, pero hablando muy poco de Concepción y sus comunas aledañas, donde hubo tantos destrozos como en la capital de Ñuble. Muchos pueblos resultaron destruidos. El alcalde de Coelemu exige que haya una mayor visibilidad de otros lugares que también fueron fuertemente perjudicados, como Coelemu. Igual se lleva una decepción cuando fue un periodista y habló de los destrozos, pero se equivocó, ya que en vez de decir Coelemu dijo Copiulemu".

Para la doctora en literaturas hispánicas, este libro "es un texto político, que coincidimos con el profesor Ostria que ocurre entre dos terremotos y dos muertes. Entre el terremoto de Chillán y el terremoto del Golpe de Estado, y entre la muerte de primera la guagua de la familia Cifuentes y la muerte de la democracia chilena.

(información proporcionada por Mauricio Mondaca, Diario Concepción)